Ana (40) conduce muy seria y enfadada. A su lado está Mateo (42), su marido, que está muy tenso y le dice que dé la vuelta ya. Dan la vuelta a la dirección del coche y vuelven a un lugar donde encuentran una gorra infantil. Descubrimos que han dejado allí a su hijo de siete años, castigado, para darle una lección. Salen del coche, angustiados, han pasado dos minutos, pero ya no está.
Ana (40) conduce muy seria y enfadada. A su lado está Mateo (42), su marido, que está muy tenso y le dice que dé la vuelta ya. Dan la vuelta a la dirección del coche y vuelven a un lugar donde encuentran una gorra infantil. Descubrimos que han dejado allí a su hijo de siete años, castigado, para darle una lección. Salen del coche, angustiados, han pasado dos minutos, pero ya no está.