La historia universal está signada por la coerción de los poderosos. Hombres plateados entran en las conciencias, se adueñan de los deseos. Recorren paisajes de pulsiones oníricas con el objetivo de procesar información para dominar individuos. Desmantelan mentes creando disrupciones entre los diferentes planos de existencia. En defensa, surgen personalidades de Mía, que muestran su mundo interior. Incapaces de generar un centro, la necesidad genera desconfianza, y la disolución ocurre en múltiples capas.
La historia universal está signada por la coerción de los poderosos. Hombres plateados entran en las conciencias, se adueñan de los deseos. Recorren paisajes de pulsiones oníricas con el objetivo de procesar información para dominar individuos. Desmantelan mentes creando disrupciones entre los diferentes planos de existencia. En defensa, surgen personalidades de Mía, que muestran su mundo interior. Incapaces de generar un centro, la necesidad genera desconfianza, y la disolución ocurre en múltiples capas.